La homosexualidad es una realidad bastante vigente en nuestros días. Muchas veces hemos escuchado sobre los derechos de los homosexuales, de los gays y las lesbianas; que la homosexualidad es una enfermedad o que es una condición humana. En realidad, ¿qué tanto sabemos sobre este tema? El equipo de Family doctor nos lo explica.
La homosexualidad no es más que la atracción sentimental o física que siente una persona por otra del mismo sexo. Generalmente, a un gay (hombre homosexual) o a una lesbiana (mujer homosexual) no les atrae todos los miembros de su mismo sexo: al igual que los heterosexuales (personas que gustan del sexo opuesto) tienen ciertos gustos y criterios al momento de elegir a su compañero o compañera. Debemos aclarar que la heterosexualidad o la homosexualidad no son lo mismo que la bisexualidad, la cual consiste en la atracción que sienten algunas personas por ambos sexos (tanto el femenino como el masculino). También debemos tomar en cuenta que no necesariamente una persona es homosexual o bisexual si decide tener una relación con alguien de su mismo sexo: experimentar con la sexualidad hace parte de la condición humana, sobre todo en la adolescencia y al comienzo de la vida adulta. Esto se debe a que el ser humano, al crecer, desarrolla su orientación sexual o la cambia.
No existe como tal una razón científica y comprobable por la cual las personas sean homosexuales. Hay quienes creen que esto se debe al resultado de los genes o factores sociales o individuales. Otras personas piensan, quizás erróneamente, que la homosexualidad se debe a problemas familiares. Sin embargo, ya está comprobado que no es una enfermedad. Tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la Asociación Psicológica Estadounidense (APA por sus siglas en inglés, American Psychological Association), han afirmado que no es un trastorno mental.
Hay quienes creen, incluso, que pueden forzar a una persona a ser gay o dejar de serlo. Generalmente esto no otorga mayores resultados, sino que más bien puede causarle a la persona que se encuentra bajo presión a sufrir de estrés, ansiedad y depresión. Quizás este sea un problema latente en la sociedad de hoy en día y esto se debe a que, por razones religiosas, sociales o culturales, no todas las personas ven con buenos ojos la homosexualidad, y es debido a esto que nace el término ‘homofobia’.
La homofobia consiste en el miedo, prejuicio o discriminación hacia las personas homosexuales. Mucha gente ha arremetido tanto verbal como físicamente contra personas homosexuales por razones irracionales, por miedo e incluso ignorancia. Cosa bastante criticada en la actualidad. Es por ello, que algunos gays o lesbianas tienden a sentirse inseguros al momento de expresar sus orientaciones sexuales: la expresión ‘salir del clóset’, es un claro ejemplo de esto, debido a que los muestra, metafóricamente, encerrados en una caja y con la expectativa y la presión de tener que salir en algún momento y mostrar, como decimos vulgarmente, «los trapitos» al público. Es decir, ‘salir del clóset’ significa el que una persona haga público, o por lo menos ante los padres, familiares cercanos o amigos, su naturaleza homosexual.
Salir del clóset siempre será su decisión, no la de los demás. Para ello, debe sentirse cómodo del momento y la forma en qué lo hará; siempre es recomendable y saludable el compartir sus sentimientos o ideas con quienes lo rodean aunque esto no quiere decir que los demás lo tomen como una decisión acertada o aceptable en algunos casos. «Si siente que no les puede contar a sus padres, cuéntele a un amigo o a alguien en quien usted confíe. Es posible que las personas que son más cercanas a usted ya lo sepan y estén esperando a que usted se sienta lo suficientemente cómodo para hablar acerca de ello», nos aconseja el personal de Family doctor.
Fotos: Difusión