Propiedades del carbón vegetal

Las propiedades del carbón vegetal empiezan a redescubrirse de nuevo ya que es un remedio muy barato y con un sinfín de propiedades para nuestra salud.

¿Qué es el carbón vegetal?

El carbón vegetal no es el mismo carbón que se vende en los supermercados como combustible para hornos convencionales o barbacoas, ya que éstos llevan procesos químicos tóxicos para aumentar la duración de su combustión.

El carbón vegetal medicinal, se obtiene de cáscaras de coco, madera de haya, eucalipto, álamo negro, sauce, pino, roble y otros.

El carbón vegetal se forma cuando la madera es calentada en ausencia de aire. Se le llama «carbón activado» cuando está preparado en un laboratorio especializado para aumentar su poder de absorción.

El carbón tiene la propiedad única de absorber (es decir, retener en su superficie) o remover gases venenosos, drogas, químicos, tóxicos, bacterias y virus.

Ventajas del carbón vegetal: Es simple de hacer y fácil de usar; es barato y fácil de adquirir; es inofensivo y muy efectivo.

Propiedades del carbón vegetal

A nivel interno se toma en caso de:

Envenenamiento.

*Náuseas y vómitos.

*Diarreas.

*Gases.

*Acidez de estómago.

*Reflujo esogástrico

*Dolor de garganta.

*Dolor de muelas, infección de las encías.

*Halitosis

A nivel externo se aplica, en forma de cataplasmas o baños, en caso de:

Picaduras de abejas, insectos, arañas y serpientes.

Infecciones de la piel y dermatitis por plantas venenosas.

Infecciones de ojos y oídos.

Agente desodorante.

Usos externos del carbón vegetal

El polvo del carbón vegetal puede mezclarse con agua hasta obtener una consistencia pastosa (linaza molida o almidón de maíz pueden añadirse un poco para que no se seque tan rápido el carbón) y ser usado como cataplasma.

Extienda la pasta de carbón sobre la mitad de una toalla de tela o papel, doble la otra mitad de la toalla sobre la pasta, y colóquela directamente sobre la parte afectada.

Precaución: Es mejor no colocar directamente el polvo de carbón sobre la piel que tiene una cortadura o está abierta, pues el carbón puede causar el efecto de un tatuaje.

Uso interno (oral)

El carbón vegetal no tiene efectos tóxicos. Use la cantidad que necesite con la frecuencia que lo necesite. Mezcle cuidadosamente de 1 a 2 cucharadas de polvo en poca agua; llene el vaso con más agua y tómesela.

Es mejor tomar el carbón entre comidas pero si la comida es la causa de la enfermedad (en caso de no ser alimentos muy saludables) tome el carbón cada vez que lo necesite. Lo puede usar en gárgaras, con el polvo diluido, y en enjuagues bucales u oculares.

Gran remedio de urgencia

El carbón vegetal, por ser un antídoto y antidiarreico muy efectivo, no debería faltar en ningún botiquín.

Precauciones en su uso

El carbón vegetal NO sustituye ni al vómito ni al lavado gástrico; es un complemento altamente efectivo; se recomienda primero vaciar el estómago mediante uno de estos dos métodos, y a continuación proceder a administrar el carbón vegetal.

En casos de urgencias en intoxicaciones, se puede hacer masticar al intoxicado cualquier trozo de carbón de madera de árboles NO tóxicos, o incluso un trozo de pan quemado.

¿Dónde se puede conseguir?

El carbón vegetal lo puede conseguir en tiendas de productos naturales, farmacias de productos medicinales naturales, boticas, herbolarios, por internet, etc. Todo depende del lugar o país donde usted resida. Se presenta en forma de comprimidos o cápsulas. También se encuentra en polvo.

¿Y si me es imposible conseguir el carbón vegetal?

Si tiene problemas para conseguir el carbón, o desconfía de su origen, puede hacerlo fácilmente usted mismo en casa:

Corte la madera que recomendamos arriba en trozos uniformes y quite la corteza. En un hoyo, hecho en la tierra, amontone la madera y encienda el fuego (no use ningún combustible químico para esto) con hojas secas y cáscaras de coco seco. Después que la madera haya comenzado a arder, cúbrala con un pedazo de hojalata y amontone tierra encima de ésta.

Deje un pequeño agujero para que entre sólo una pequeña cantidad de aire (con el fin de mantener un proceso lento de quemado) durante varios días. Una vez que el proceso de quemado concluya, deje el carbón quemado ahí hasta que se enfríe. Si el carbón está aún caliente y se expone al aire, se encenderá en llamas.

Para propósitos medicinales, corte el carbón en pedazos grandes; esterilícelo, calentándolo en una vasija de barro de 20 a 30 minutos; muela los pedazos de carbón hasta producir un polvo fino y guárdelo en un recipiente seco y bien cerrado.

Fuente: www.enbuenasmanos.com

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *