Lo que debemos saber de nuestro cuerpo

cuerpo-lucirsaludableMuchas veces hay dolores o reacciones del cuerpo, que no sabemos cómo manejar o mejorar: la mayoría de éstas tienen una solución y aquí les dejamos algunas.

Si te pica la garganta, ráscate el oído: al presionar los nervios de la oreja, se genera un reflejo en la garganta que alivia la molestia.

Para aguantar las ganas de ir al baño piensa en sexo: pensar en sexo entretiene a tu cerebro y el estrés disminuye.

Toser mientras te vacunan reduce el dolor: si toses justo cuando te inyectan, se aumenta la presión en el pecho y en la espina dorsal, esto inhibe los conductores de dolor de la médula.

Si tienes la nariz tapada: toca el paladar con la lengua fuertemente y con un dedo sujeta la nariz bajo la entreceja: esto permite que las secreciones se muevan y puedas respirar.

Si tienes acidez, duerme sobre tu lado izquierdo: crea un ángulo entre el estómago y el esófago, para que los ácidos no puedan pasar a la garganta.

Cuando te duela una muela frota un hielo en tu mano: pasa el trozo de hielo por la zona en forma de “v” que se produce entre el dedo pulgar y el í­ndice por la parte contraria a la palma. Esto reduce en un 50% el dolor, ya que este sector está conectado a los receptores de dolor de la cara.

Cuando te quemes, presiona la herida con un dedo: haz presión con la mano en la quemadura, ya que esto permite volver a la temperatura inicial y evita la aparición de ampollas (en quemaduras pequeñas).

Cuando corras, respira cuando apoyes el pie izquierdo: evitará que sientas molestias en el pecho, ya que si respiras cuando apoyas el pie derecho, causas presión en el hígado

Si te sangra la nariz, haz presión con tu dedo: si te echas para atrás puedes ahogarte con tu sangre, así­ que lo mejor es apretar con tu dedo el lado de la nariz en que tienes la hemorragia.

Para evitar que se te congele la cabeza cuando tomas cosas frías: el paladar se enfría y el cerebro lo interpreta. Por eso debes colocar tu lengua sobre el paladar para que vuelva a su temperatura normal.

Para despertar manos y pies dormidos: cuando se te duerma un brazo o la mano, gira tu cabeza de un lado a otro y verás como la sensación pasa en menos de 1 minuto, ya que las extremidades superiores se duermen, por presión en el cuello. Si es una pierna o un pie, sólo camina unos segundos.

 

Fuente: erikatipoweb.com