Muchas veces los padres han tenido problemas con sus hijos, generalmente cuando estos son pequeños. Los niños, como fuente de energía desmedida, corretean de un lado a otro, pasan jugando gran parte de su infancia, a veces son amorosos pero en otras ocasiones pueden presentar un comportamiento que no siempre es el adecuado, como ser groseros, portarse mal, o romper cosas. Pero un comportamiento «bueno» siempre va de la mano del punto de vista social, cultural y del entorno en donde se desarrolla el pequeño.
Según el personal de Family Doctor, lo primero que debemos saber es cuándo recompensar o castigar el comportamiento de nuestro pequeño. Debemos ser consistentes en este aspecto debido a que recompensar al niño o castigarlo en diferentes ocasiones puede confundirlo en vez de enseñarle. Hay tres opciones que los padres pueden tomar en caso de que el comportamiento del niño no sea el más adecuado…
- Decidir que el comportamiento no es un problema debido a que es acorde a la edad y al desarrollo del pequeño;
- Intentar detener este comportamiento al ignorar o castigar al niño;
- Presentarle al pequeño un nuevo comportamiento que usted haya elegido y reforzarlo premiando al pequeño.
Una de las formas para detener el mal comportamiento en un niño es ignorándolo: a medida que pase el tiempo esto funcionará de manera más eficiente. Otra forma es utilizando el método de «tiempo-fuera», el cual consiste en advertirle al al niño con ponerlo en un lugar que le sea poco atractivo, es decir, si el pequeño hizo una pataleta o berrinche, puede decirle que lo va a sentar en el rincón o meterlo en el corral, de manera que el niño comprenda que su comportamiento es malo y no debe repetirlo. Si el niño aún persiste con el berrinche, debe llevarlo con toda calma hasta el lugar del tiempo-fuera.
Es recomendable contar el tiempo en que deja al niño en el área de tiempo-fuera; de ser posible, puede tomar un reloj con alarma de manera que el niño sepa cuándo se acaba el castigo. Generalmente, el tiempo-fuera debe ser breve: un minuto por cada año de edad que tenga el pequeño, y éste debe comenzar cuando el niño se calme o inmediatamente después de llegar al lugar de tiempo-fuera. También es recomendable que usted se encuentre cerca del niño pero que no le dirija ninguna palabra mientras dura el castigo. Si el pequeño sale del área en la que lo colocó, debe llevarlo con la misma calma hasta el sitio y empezar nuevamente con el conteo. Apenas termine el tiempo, puede dejar que el pequeño salga del área pero no le hable sobre el mal comportamiento, sino que intente después formas de premiar el buen comportamiento.
El tercer punto de las 3 opciones que nos da Family doctor es el de fomentar un nuevo comportamiento. ¿Cómo se hace esto? Utilizando un sistema de premio. Este sistema es mejor usarlo con niños mayores de 2 años y puede tardarse hasta 2 meses en funcionar. Sería muy útil para los padres llevar un diario de comportamiento.
Primero, debe elegir entre uno y dos comportamientos que le gustaría cambiar: cepillado de dientes, hábitos antes de acostarse, recoger los juguetes, etc., y escojer un premio para el niño. Luego de haber determinado estos puntos proceda a explicarle al niño qué es lo que quiere que cambie y cuál es el premio que obtendrá si cumple con lo prometido. Debe solicitar este nuevo comportamiento solamente una vez. Si el niño lo cumple debe premiarlo, pero si no lo cumple no debe regañarlo ni castigarlo: simplemente no obtendrá el premio. Puede ayudar al niño, de ser necesario, durante esta tarea pero no puede involucrarse demasiado debido a que ellos atesoran la compañía de sus padres que podrían preferir ésta al premio.
Un ejemplo de buenos premios para el pequeño serían leerle un cuento antes de dormir, permitirle dormir un poquito más tarde o darle un bocado de algo que le guste. Para los más grandes puede considerar en darle un juguete especial, un privilegio o una poca cantidad de dinero. También tiene los siguientes métodos para premiarlo:
Ganarle al reloj (para niños holgazanes): Este juego consiste en darle al niño un tarea para completar antes de un tiempo determinado. La cantidad de tiempo la decide usted determinando el menor tiempo en que se puede completar la tarea y sumándole 5 minutos más.
El juego del buen comportamiento (para enseñar nuevos comportamientos): Aquí, usted deberá realizar una lista corta de comportamientos en una tabla y marcar con una estrella cada vez que usted observa uno de estos comportamientos en el niño. Luego que el pequeño haya conseguido cierta cantidad de estrellas (dependiendo de su edad) puede premiarlo.
Marcas buenas y marcas malas (para niños difíciles y activos): en un pequeño período de tiempo (una hora aproximadamente) ponga una marca en una tabla o en la mano del niño cuando éste se esté comportando bien; también lo puede hacer cuando tenga un mal comportamiento pero utilizando marcas negativas. Si al final tiene más marcas positivas que negativas, puede darle un premio.
Hacer silencio por un tiempo (útil mientras usted prepara la cena): Pídale a su niño que jugue en silencio durante un período corto de tiempo, digamos unos 30 minutos. Frecuentemente debe fijarse en lo que el pequeño está haciendo: debe hacerlo cada 2 o 5 minutos dependiendo de la edad del niño. Debe premiarlo en estos intérvalos o darle una ficha si el niño jugó bien o estuvo callado. Gradualmente puede ir aumentando los intérvalos de tiempo pero debe premiarlo en los mismos.
Estos métodos puede utilizarlos para hacer que su niño se comporte de forma más adecuada. Siempre es recomendable evitar las peleas con él y aceptar la personalidad del pequeño, es decir, si es tímido o sociable. No lo critique en frente de otras personas, no lo califique como malo sino que describa su comportamiento como tal y elógielo con frecuencia cuando lo merezca. Debe tratarlo con cariño ya que los niños siempre quieren y necesitan del afecto de sus padres. El castigo físico, si bien puede frenar un mal comportamiento durante algún tiempo, no es la mejor manera de enseñarle a su hijo a cambiar el mismo, sin mencionar que el pequeño puede adquirir una conducta agresiva. Si no se le enseña al pequeño un buen comportamiento pues es bastante probable que no lo aprenda, es por ello que es más reomendable premiarlo cuando hace algo bien que castigarlo por algo malo si éste no tiene otra opción que escoger.