Ingredientes:
• 12 a 15 sardinas medianas limpias y sin cabeza
• 1 tomate
• 1 diente de ajo
• orégano
• 1/2 vaso de vino blanco o vinagre
• aceite de oliva virgen
Preparación:
Picar el ajo muy fino. Pelar y partir el tomate en cuadraditos. En una fuente de horno, con el fondo untado de aceite, disponer las sardinas, espolvorear con el ajo y repartir el tomate; salpimentar, rociar con vino blanco y, por último, orégano. Introducir la fuente en el horno, precalentado a 200 C, durante cinco o seis minutos, dependiendo del tamaño de las sardinas. Servir.